No merece tu tiempo, ni tu amor, ni tu persona, ni tu comprensión.
Hay muchas mujeres, al igual que también, porque no decirlo, algunos hombres, que dia a dia viven el martirio del maltrato como un tormento cotidiano.
Siempre debemos recordar que quien insulta una vez, lo hará de nuevo en cualquier momento, quien humilla una vez no dudará en seguirlo haciendo. Quien pega una vez, te destruirá en un próximo encuentro.
Hay personas que no cambian en sus pérfidas costumbres ni en sus deseos de dominación porque están presos de una pobre personalidad que les acompleja y les impide pensar en alguien más que no sea en ellos mismos. Pero los demás, los que estamos en el otro lado, ten por seguro que si que podemos hacerlo.
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